Instalaciones Fotovoltaicas
Las instalaciones fotovoltaicas son sistemas de generación de energía eléctrica que aprovechan la radiación solar para producir electricidad de manera directa.
Están compuestas principalmente por paneles solares, que contienen células solares capaces de convertir la luz del sol en electricidad, y por inversores que convierten la corriente continua en corriente alterna, que es la forma de electricidad utilizada en nuestros hogares y empresas
On Grid
Las instalaciones fotovoltaicas on-grid son sistemas de generación de energía solar que están conectados a la red eléctrica convencional. Esto significa que, además de aprovechar la energía solar, también están vinculados a la red pública de suministro eléctrico, de esta forma si la demanda energética es mayor a la generada entonces la potencia que falte será tomada directamente del medidor de la red pública. Este sistema se utiliza para disminuir el consumo eléctrico en hogares, comercios e industrias.
¿Cómo Funciona?
Los paneles solares fotovoltaicos captan la energía del sol a través de células fotovoltaicas que convierten la luz solar en corriente eléctrica continua. Esta es enviada a un inversor, que convierte esta corriente continua en corriente alterna, la forma de electricidad que utilizamos en nuestros hogares y negocios.
La electricidad generada por el sistema solar se utiliza directamente para alimentar los dispositivos y equipos eléctricos conectados a la red interna del edificio. Si la producción solar excede la demanda de energía del lugar, el excedente se vierte a la red eléctrica pública. Si hay un déficit de energía, se obtiene de la red convencional.
Beneficios
Ahorro en la Factura de Electricidad
Bajo Mantenimiento
Ingresos por Excedente
Contribución a la Sostenibilidad
Off Grid
Las instalaciones fotovoltaicas off-grid son sistemas de generación de energía solar que operan de forma independiente y no están conectados a la red eléctrica convencional.
Esto significa que son capaces de satisfacer completamente las necesidades energéticas de un lugar sin depender de la red pública. Este sistema es ideal para zonas aisladas, rurales o afectadas por los cortes de luz.
¿Cómo funciona?
Los paneles solares fotovoltaicos captan la energía solar a través de células fotovoltaicas, convirtiéndola en corriente eléctrica continua. Esta electricidad luego es almacenada en baterías, permitiendo conservar el excedente de energía generado durante el día para su uso en momentos de escasa luz solar, como durante la noche o en días nublados.
Posteriormente, la corriente continua almacenada en las baterías es dirigida hacia un inversor, que la transforma en corriente alterna, la forma de electricidad utilizada en nuestros hogares y negocios. La electricidad generada se emplea directamente para alimentar dispositivos y equipos eléctricos en el lugar.
Por último, un sistema de control eficiente gestiona la distribución de la energía, asegurando que la demanda sea satisfecha y manteniendo un nivel óptimo de carga en las baterías.